Los jets privados mantienen su vuelo durante la pandemia y crisis del petróleo

La demanda de jets privados ha experimentado un notable crecimiento desde el inicio de la pandemia de COVID-19. Este aumento se atribuye al temor a contagios y a las cancelaciones masivas y restricciones que han complicado los viajes en aerolíneas comerciales.

Philippe Scalabrini, director de la división del sur de Europa de VistaJet, indicó que la pandemia forzó a muchas personas a buscar alternativas para sus necesidades de viaje. Dijo que aquellos que pueden permitírselo prefieren contar con un avión entero a su disposición.

Los informes del regulador de tráfico aéreo Eurocontrol reafirma esta tendencia, revelando que la participación del viaje aéreo privado casi se duplicó entre 2019 y 2021.

Durante una visita a la flota más reciente de VistaJet, Scalabrini mostró cómo es la experiencia de volar en un jet privado de lujo, como el Global 7500, que tiene un precio de 72 millones de dólares. En estos aviones, los pasajeros encuentran confort, con asientos de cuero, camas dobles y un servicio de vinos gourmet.

La experiencia de vuelo también se optimiza para mayor comodidad, permitiendo a los pasajeros dormir tan bien como si estuvieran en su hogar. Además, sus mascotas son bienvenidas a viajar junto a ellos con juguetes y golosinas.

VistaJet recibe a individuos adinerados y líderes empresariales, con contratos anuales que inician en 500,000 euros. Scalabrini destacó un crecimiento en su clientela, especialmente entre aquellos que provienen del sector tecnológico.

A pesar del aumento de la demanda, la crisis de Ucrania y el subsiguiente aumento en los precios del petróleo presentan desafíos para la industria. Scalabrini mencionó que el impacto de estas circunstancias era, hasta ahora, mínimo para su empresa.

Sin embargo, la industria de jets privados no es ajena a las críticas en torno a su contribución al cambio climático. Un estudio indica que los vuelos en jets privados generan diez veces más contaminación que los vuelos comerciales.

A largo plazo, las preocupaciones ambientales representan un desafío significativo para el sector. En el corto plazo, el aumento de los precios del petróleo y la capacidad de retener a clientes obtenidos durante la pandemia son cuestiones vitales.

Expertos sugieren que, a pesar de la alta inversión necesario para adquirir un jet, el aumento en el costo del combustible podría no ser un problema inmediato para la clientela adinerada, ya que la comodidad y conveniencia de estos vuelos son igualmente valoradas.