Emprendedores turísticos de Bali esperan regreso de visitantes extranjeros

Bali se reabre a los turistas internacionales, lo que genera un ambiente de optimismo y resiliencia en su industria turística tras la pandemia de COVID-19.

El emprendedor turístico balinés I Ketut Ardana expresó su entusiasmo por la reapertura de la famosa isla de vacaciones de Indonesia, que estuvo cerrada durante más de un año y medio para los viajeros internacionales.

Desde el 14 de octubre, vuelos de 19 países, incluyendo China, Corea del Sur, Francia, Nueva Zelanda y los Emiratos Árabes Unidos, pueden llegar a Bali, conocido por sus hermosas terrazas de arroz, templos hindúes y playas de arena blanca.

La reapertura se ha facilitado debido a que el 99 por ciento de los residentes de Bali ha recibido al menos una dosis de la vacuna contra el COVID-19 y más del 80 por ciento ha completado su esquema de vacunación.

Indonesia ha estado relajando las restricciones de COVID-19, conocidas como PPKM, en respuesta a la disminución de casos, muertes y hospitalizaciones.

A pesar de la reapertura, I Ketut Ardana advirtió que los turistas no llegarían de inmediato, reflejando la incertidumbre que aún existe en la industria.

Hasta el segundo día después de la reapertura, no se habían registrado vuelos internacionales en el Aeropuerto Internacional I Gusti Ngurah Rai, según las autoridades de Bali.

I Putu Astawa, jefe de la agencia de turismo de Bali, explicó que los requisitos de visa y otros trámites para los visitantes internacionales están siendo organizados, lo que puede estar retrasando la llegada de turistas.

El gobierno indonesio exige que todos los visitantes estén completamente vacunados y cumplan con una cuarentena de cinco días a su costo, además de seguir normas estrictas de entrada.

A pesar de los requisitos de cuarentena, Ardana cree que esto no desalienta a los turistas europeos, quienes suelen quedarse en la isla por tres semanas.

Sin embargo, la duración promedio de estancia de los turistas provenientes de países asiáticos como China y Corea del Sur es de solo cinco días, lo que podría ser un desafío para su llegada.

Indonesia, con su plan de vacunar a 208.26 millones de personas, espera que la reapertura del turismo relance la economía de Bali, históricamente dependiente de la industria turística.